martes, 10 de febrero de 2009

Instrucciones para confrontar nuestros pecados Cap. 6

En capítulos anteriores hemos visto la realidad del pecado, su remedio y el poder del Espíritu Santo que actúa a nuestro favor, participando activamente para enfrentar nuestra iniquidad. (romanos 8:13) En este capitulo vemos como no es suficiente con aceptar que en efecto toleramos alguno de ellos, ni conformarnos con la frase "Después de todo, nadie es perfecto". No podemos continuar ignorandolos como en el pasado, debemos enfrentar honestamente esos pecados.

Se nos presentan algunas instrucciones en cuanto a como confrontar los pecados aceptables. Resumiéndolas serian las siguientes:

  • Ponerlo bajo la luz del evangelio.- Recordar que Dios ya ha perdonado nuestro pecado desde el momento en que nos arrepentimos, Dios nos acepta como personas justas.
  • Depender del Espíritu santo.- No dependamos de nuestras fuerzas si no de la obra que El hace en nosotros. Reconociendo nuestra parte en la responsabilidad. "Trabaja como si dependiera de ti, y confía como si no trabajaras"
  • Identificar áreas especificas.- Reconocer nuestras áreas débiles nos permite anticiparnos a las circunstancias que nos tientan, y nos permite ponerlas en oración pidiendo la obra del Espíritu Santo.
  • Emplear escrituras especificas.- El memorizar versículos que nos alientas, siempre traerán animo en momentos dificiles de nuestra vida.
  • Oración.- Pedir por nuestros pecados y el poder del Espíritu Santo traerá a nuestra mente una consciencia de necesidad de Dios en nuestra vida. Orando en todo momento, ya sea de una manera planificada y constante, o en momentos espontáneos y breves, aprovechando la bendición de ser escuchados por Dios, sabiendo que es misericordioso para responder.
  • Involucra a otros creyentes.- Siempre se ha dicho, mejor dos que uno solo. (eclesiastés4:10)
Aun cuando todo empeore, nos ayudara a ver cuan arraigados están nuestros pecados sutiles y cuanto dependemos de su poder para continuar.